Es básico que todos, especialmente los niños y jóvenes, conozcamos la gran importancia que tuvo la contribución de los caballos y de los perros en el desarrollo de la especie de los Humanos.
Hasta la llegada de las máquinas, el caballo fue un elemento fundamental para viajar y para el transporte de mercancías, ayuda inestimable en la labranza de las tierras y fuerza de trabajo para las actividades productivas e industriales.
El caballo fue también una formidable máquina de guerra, que permitió a muchos pueblos conquistar tierras lejanas, además de ser un medio esencial para las migraciones.
Por eso, los caballos estarán presentes en muchas de las leyendas que Anita, nuestra narradora, nos explicará. Nos destacará la relevancia que tuvo para los Humanos el hecho de poder domesticar los caballos, estos fieles y alegres amigos.
Tres razas de caballos serán protagonistas de estas historias. Una de ellas será la raza de los "Caballos Imperiales", los descendientes de los caballos blancos de la diosa Épona.
Caballos de gran belleza, elegantes tirando de ligeras calesas o haciendo ejercicios de doma clásica, muchos emperadores, reyes, generales y personajes ilustres los han cabalgado.